Se le atribuye a la escuela italiana de finales del siglo XVI o principios del XVII.
Representa a Jesús en la Cruz acompañado por la Virgen y San Juan y un ermitaño al fondo.
En la parte posterior del cuadro esta representado el triunfo de la eucaristía.
El origen del cuadro es confuso, en un documento fechado en 1781 aparece: habiendo unos ermitaños viviendo en unas cuevas, el el citado risco llegó a descansar un arriero que traía paño de venta, deslió un fardo y entre el paño traía la dicha Imagen y por el favor recibido, manifestando su agradecimiento les donó la dicha Imagen.