Se conoció muchos años como Calle del Mesón de la Parra, antiquísima posada que alcanzó en funcionamiento estos tiempos modernos. Sin duda la más famosa e importante de la ciudad por siglos, debido a su vecindad, pared con pared, con el viejo Palacio Episcopal. Como casi todos los mesones nacidos en los siglos XIV y XV estaba inmediato a las puertas de la muralla para mayor comodidad de los viajeros, en este caso a la Puerta de Santa María (Muralla. Puerta de Santa María), sin duda la más importante y monumental de la ciudad.
En el centro de su solería de mármol tiene un mosaico circular hecho con pequeños cantos rodados.