Uno de los cuatro Padres y Doctores de la Iglesia oriental (junto a san Atanasio, san Basilio y san Juan Crisóstomo)
Gregorio Nacianceno nació cerca de Nacianzo, en Capadocia (actualmente en Turquía) hacia el año 329
Estudió en Cesarea (Palestina) y en Alejandría (Egipto).
Después pasó a Atenas con San Basilio, su compatriota y amigo.
Fue bautizado en el año 360 por su padre, que era obispo de Nacianzo.
Con la firme decisión de llevar una vida de devoción marchó al Ponto, donde vivió en el desierto próximo al río Iris (actual río Yesil Irmak, Turquía) con san Basilio.
Entre los dos recopilaron una antología de escritos del maestro y teólogo cristiano Orígenes, llamada Philokalia (en griego, "amor a la belleza").
Basilio fue nombrado más tarde obispo de Cesarea
En el año 371 o 372 convenció a Gregorio para que aceptara la sede de Sásima, un pueblo de Capadocia.
Sin embargo, a Gregorio no le gustaba la vida pública y, hasta la muerte de su padre en el año 374, estuvo retirado.
En el año 378 o 379 Gregorio se hizo cargo de la congregación nicena de Constantinopla.
Aquí pronunció cinco discursos sobre el dogma de la Trinidad que le dieron el apodo de Teólogo.
Hizo muchas conversiones entre los arrianos (que negaban que Jesús fuera Dios).
El emperador Teodosio se declaró su protector: lo nombró arzobispo de Constantinopla y reunió en esta capital un concilio para confirmar su elección.
Pero no tardaron los obispos de Egipto en atacar al nuevo arzobispo.
Entonces, Gregorio, abandonado por todos, incluso por el mismo emperador, y ante la resistencia de los arrianos, dimitió, con la esperanza de evitar nuevos cismas, y volvió a su pueblo, Nacianzo, donde vivió en la soledad hasta su muerte en el 389, dedicándose a escribir muchas obras que han inmortalizado su nombre.
De sus escritos se han conservado 45 sermones, 243 cartas y 407 poemas dogmáticos y morales.
En su obra Discursos teológicos defendió el dogma de la Trinidad.