http://pda.redjaen.es/francis/?m=c&o=241818
Calentador de cama
Historia > Historia de las cosas
Calentador de cama
Calentador de cama. Calentador de cama del siglo XVI. Exposición Palacio Episcopal Salamanca
  • Consistía en un recipiente con una tapa y un mango largo que se deslizaba entre las sábanas de las camas.
  • Antes de la difusión de los sistemas de calefacción en los hogares no todas las habitaciones de la casa contaban con fuentes de calor. En particular, los dormitorios podían quedarse muy fríos por la noche durante los meses del invierno. Introducir el calentador dentro del lecho constituía una forma de mitigar la sensación de humedad y frescor al irse a dormir.
  • El recipiente estaba fabricado en cobre o latón siendo el mango bien metálico, bien de madera.
  • En su interior se introducían piedras calientes o ladrillos calentados al fuego o incluso las propias brasas de la cocina.
  • Es por ello que la ubicación habitual de los calentadores eran las inmediaciones de la chimenea en donde se colgaban de la pared gracias a un agujero en el mango.
  • Los calentadores estaban diseñados para ser movidos en el interior de la cama para distribuir el calor por toda su superficie.
  • Algunos ejemplares contaban orificios en la tapa a través de los que dejaba escapar el calor. Otros eran completamente descubiertos con una estructura semicircular en su parte superior para alejar las brasas de la sábana.
  • Su composición enteramente de metal hacía que el calor se tranmitiera uniformemente tanto a las sábanas bajeras como a las superiores.
  • En el siglo XIX también se dieron los calentadores totalmente cerrados destinados a introducir agua caliente en su interior.