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Tranvía de Linares
Estaciones
La historia del tranvía de Linares arranca del final del siglo XIX, concretamente en 1899.
Tiene en la persona de don Antonio Conejero Sánchez, conocido industrial de la ciudad (constructor, entre otras cosas, de la famosa chimenea de la fundición La Cruz, la obra más alta de la provincia por aquellos tiempos) a su artífice.
Motivado sin duda por el esplendor minero de Linares, intuyó la necesidad de facilitar el transporte de personas y mercancías desde la población hasta las minas para lo cual hizo un proyecto de tranvía eléctrico (energía nueva por aquel entonces) de Linares a la mina de San Roque (Mina San Roque) por un lado (atravesando numerosas explotaciones) y por otro de Linares a la Fundición de plomo La Tortilla (Fundición La Tortilla).
Se establecen cuatro ramales de tranvía: tres a las estaciones de ferrocarril enclavadas en el casco urbano (Andaluces, Almería y M.Z.A.) y otro a la fundición de San José (Pozo San José).
Conejero vende la concesión del tranvía a la Compañía d´Electricitè et de Traction d´Espagne (de capital francés) en agosto de 1904.
Conejero jugó también un importante papel en la construcción del tranvía de La Loma.
En los años veinte el tranvía se extiende y ramifica aún más por las cuencas mineras, existiendo el proyecto de alargarlo hasta Villacarrillo, Villanueva del Arzobispo y otros pueblos de la Loma, según los proyectos de Armando Plasman, director de la compañía, pero finalmente no se llevarían a cabo. Pero si se llegó a construirse la Estación Subterránea de Tranvías, para unir el Tranvía de La Loma con el Tranvía Minero, también se conserva el Túnel del Tranvía, que era un largo túnel para el soterramiento de la vía que llegaba a la Estación Subterránea de Tranvías. También se conserva el Viaducto del Tranvía que salvaba el Río Guadalimar poco después de la salida de dicho túnel.
La crisis minera que atenazaba a Linares a finales de aquellos años también afectó a este medio de transporte.
La Cía. d´Electricitè se desembaraza de los tranvías y cede la concesión de los mismos a una empresa llamada Tranvías de Linares, S.A.
Tranvías de Linares S.A. nacida en 1932.
Explotación de Ferrocarriles del Estado se incauta en nombre del Estado de la explotación del tranvía, empezando a funcionar en su nombre a partir del día 1 de septiembre de 1934.
En los años sesenta, con su gran crisis de la minería y consiguiente emigración, que diezmaba nuestra población, es cuando desaparece el tranvía.
A las afueras de Linares por la zona de Linarejos se conserva la antigua Estación de Tranvías.