Recipiente de cristal o cerámica de capacidad variable, cuyo detalle más representativo es su forma: una botella abombada en la base o de vientre abultado, con un largo pitorro acabado en punta y perforado para facilitar la salida del líquido, y un brazo largo en el lado opuesto para sostenerlo mientras se usa. También se llama porrón a la vasija de barro con forma similar usada para beber agua o vino.
Usado en toda España, permite beber vino como recipiente compartido por varias personas (sin necesidad de vasos, copas, etc) y está considerado invento nacional.
La mayoría de las fuentes sitúan su origen en los cuernos de la antigüedad, y específicamente en el ritón romano.