Es muy frecuente en los campos, zonas ruderales, márgenes de caminos.
Es mucho más pequeña que los trigos que se cultivan como cereales.
Se diferencia de Hordeum marinum porque no tiene la espiga tan comprimida y las hojas tienen pocos pelos.
Tiene una sola espiga de 10 a 12 cm de longitud, constituida por espículas aristadas. La orientación de las aristas facilita que la espiga entera, o más a menudo una parte de ella, se clave como una flecha en la ropa o entre los pelos de un mamífero para así transportar a distancia los granos.
Las hojas de la cebada bastarda son largas y planas, de 2 a 8 mm de anchura, blandas y pubescentes.