En el invierno mueren sus hojas
y tallos pero perduran sus partes subterráneas que pueden vivir durante
muchos años.
Hierba rastrera de hasta 2 m de longitud.
La correhuela se puede encontrar en toda la Península,
especialmente en tierras de labranza, sembrados, barbechos y cualquier
zona cercana a un campo de labor.
Empieza a florecer en mayo en las regiones más tempranas y puede llegar a florecer en otoño en las más tardías.
Las flores, bastante vistosas, son blancas, rosas o una mezcla de
ambas: con un fondo blanco con bandas rosadas; poseen un cáliz
compuesto por cinco sépalos verdes y su corola tiene forma de embudo.
La flor cuenta con cinco estambres y un estilo divido en dos partes.