Patas negras con los dedos de color amarillo y pico negro.
Su plumaje es completamente blanco, con plumas largas en el pecho y en
el cuello, y dos plumas, excepcionalmente largas en la cabeza en la
época reproductora.
Alimentación compuesta de peces, en gran parte.
También forman
parte de su comida los insectos acuáticos, renacuajos, etc.
Cazan en
aguas someras o terrenos húmedos, a veces en seco, andando y rara vez
volando.
Cría de forma colonial, en árboles, matorrales arbustivos,
carrizales, etc.
Ambos sexos construyen el nido, el macho aporta ramas
y tallos y la hembra construye el nido en forma de embudo.
A veces
ocupan el nido de años anteriores, con previas reformas.
En la colonia
se observan pollos de muy distintas edades, debido a la diferencia a la
hora de la puesta.
Los 3-5 huevos son incubados especialmente por la
hembra, aunque el macho también participa, durante 21-25 días.
Los
pollos permanecen en el nido un mes y alcanzan la madurez sexual con un
año de vida.
Las jóvenes garcetas optan por emigrar o bien permanecer
en zonas próximas a su lugar de nacimiento (migración parcial).
Gregaria, cría en colonias mixtas junto con otras garzas.
Migradora
parcial, en la Península Ibérica la mayoría emigra a África, aunque
algunas permanecen en la Península.
Es de actividad diurna y al
anochecer se dirigen a sus dormideros, en grupos más o menos grandes
siguiendo siempre las mismas rutas.
No amenazada, a pesar de sufrir numerosas bajas sobre todo por la
alteración de los ecosistemas.
También el hombre causó en el pasado
muchas bajas, ya que las capturaba para conseguir sus plumas como
objetos ornamentales.