Al ser cuarto privado no hay ventanas al exterior.
Los muros están ricamente decorados.
El estuco y los colores son originales.
El zócalo de azulejos es del siglo XVI, de la fábrica de azulejos sevillana.
La cúpula está decorada con mocárabes; en el suelo, en el centro, una fuentecilla servía para reflejar la cúpula de mocárabes, que al estar ricamente decorada, conseguía una luz encantadora y mágica, pues al entrar la luz por la parte superior iba cambiando según las distintas horas del día.
La leyenda y los datos históricos cuentan que el propio Mulay Hacén -el pico Mulhacén recibe su nombre- engañó con un artimaña a una treintena de caballeros del clan por confabular contra la corona y fueron asesinados. Recibe el nombre de la Sala de los Abencerrajes a partir del siglo XVI, debido al suceso relatado anteriormente.