Es un género de dinosaurios ceratopsianos ceratópsidos, que vivió a finales del período Cretácico, hace aproximadamente 70 millones de años, en lo que hoy es Norteamérica.
Su nombre se debe a las grandes aberturas que tiene su característica gola.
Inicialmente fue llamado Protorosaurus, pero este nombre había sido publicado previamente para otro animal.
Chasmosaurus era un ceratópsido de tamaño medio, entre 5 y 6 metros de largo para una altura aproximada de 2 metros, presentando un peso estimado de unas 3,6 toneladas.
Como todos los ceratópsidos, los chasmosaurios eran cuadrúpedos y herbívoros.
Tenían una enorme gola en forma de corazón que cubría hombros y cuello, y que utilizaban para disuadir a los depredadores, atraer a su pareja o incluso como método de termorregulación.
Poseía un cuerno pequeño sobre la nariz y dos sobre sus ojos.
El descubrimiento de restos de piel fosilizada de chasmosaurio, reveló la presencia de osteodermos (placas óseas) en ésta, ubicados en filas uniformemente espaciadas, con cinco o seis lados. Desafortunadamente, nada se puede aprender sobre la coloración de Chasmosaurus de las muestras fósiles conocidas de la piel.
Tenía uno de los cráneos más grandes que se conocen en un animal terrestre. El cráneo medía 2 metros de longitud y constituía cerca de una cuarta parte de la longitud total de todo el cuerpo.
El hecho de haber encontrado huesos de varios individuos agrupados en algunos yacimientos en Alberta (Canadá) sugiere que vivían en manadas. Algunos de los yacimientos llegaban a contener restos de decenas o incluso cientos de individuos. Estos yacimientos se formaron con gran rapidez, creyéndose en la actualidad que toda una manada pereció al intentar cruzar el río a nado. Las circunstancias parecen apuntar a que dinosaurios cornudos migraban a través de grandes distancias, como algunos herbívoros actuales, aunque sea una idea difícil de probar.