Es un pequeño erizo originario de gran parte del África subsahariana, desde Senegal y Mauritania al oeste hasta Sudán al este y por el sur hasta Zambia.
Las poblaciones tienen a esparcirse entre hábitats apropiados de sabana y campos de cultivos, evitando las zonas boscosas.
El erizo de vientre blanco es un animal de cuerpo oval de entre 15 y 25 cm de longitud y un peso de entre 350 y 700 gramos.
Las hembras suelen ser más grandes que los machos.
Sus patas son cortas, tiene una larga nariz y ojos pequeños.
Su color puede variar mucho, pero su color más típico es el marrón o gris con espinas de color blanco o crema.
La piel es suave en su bajo vientre y su rostro.
Su rostro habitualmente presenta una coloración más oscura, gris o negro, o es del mismo color que su parte inferior, que suele ser blanco.
El erizo de vientre blanco no entra en celo en cualquier época del año, ovulan cuando las condiciones son correctas y hay presente un erizo del sexo masculino, que suele ser durante la temporada de lluvias cuando la comida es abundante.
Los machos se acercan a la hembra y hacen la corte sobre ella con altas vocalizaciones.
La gestación dura aproximadamente 35 días.
Las crías nacen cubiertas para proteger a la madres de sus espinas, que ya están presentes desde el nacimiento, aunque les lleva algún tiempo controlar los músculos que las mueven.
Suelen tener 3 o 4 crías en cada camada, pero pueden llegar a tener hasta 8.
Las crías son destetadas a las 6 semanas y se separan de la madre poco tiempo después, alcanzando la madurez sexual a los 2 o 3 meses de edad.