Se fundó en 1896 y terminó en los años 80 del siglo XX.
Este colegio nació como un establecimiento católico docente, que proporciona estudios desde la primera enseñanza hasta la conclusión del Bachillerato y algunas carreras especiales.
Lo fundó un funcionario de Telégrafos, Cándido Nogales, y en un principio se ubicó en la plaza de Las Cruces hasta que a principios del siglo XX se trasladó a la Plaza de San Bartolomé.
El Colegio de San Agustín ocupaba un palacio señorial de la ciudad con portada de piedra, que desde antaño había sido sede de otros organismos educativos y mucho antes incluso de la Audiencia Provincial, antes de que se trasladase al que hoy es el Palacio de la Diputación.
Antes de que comenzara el siglo XX se hizo el primer intento de instaurar un colegio en la plazoleta de San Bartolomé y de hecho se fundó el Colegio de Santo Tomás.
No dio resultado y más tarde, en 1900, este edificio albergó el Colegio de San José, que aunque en un principio parecía tener un futuro prometedor, el proyecto se truncó pronto.
El Colegio de San Agustin que a tantas generaciones dio lustre bajo la tutela del inolvidable Cándido Nogales.