Convento de la Coronada

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Estaba situado en la Calle Martínez Molina, en el solar de la Plaza Rosales.
También conocido como Convento del Carmen Calzado.
El hallazgo de la imagen de la Virgen de la Coronada fue objeto de culto durante siglos en la ciudad.
La historia de la Virgen de la Coronada se repite en la tradición mariana española. Se trata, de nuevo, de una talla de una virgen que un agricultor haya cuando trabaja en el campo. Este hecho o leyenda está datado en el siglo XIII, reinando Alfonso X el Sabio.
La talla fue encontrada dentro de una campana, enterrada. Le dio nombre una corona en su cabeza.
Aparecida cerca de la Puerta de Martos (Muralla. Puerta de Martos) en el siglo XIII bajo una campana junto a la ermita de Santa Isabel "repararon mucho en la corona que tenia y por eso la llamaron dende luego la Coronada".
En torno a esta virgen se formaron otras leyendas. Se extendió su fama de intercesora por los cautivos. También se extendió el rumor de que los frailes la cambiaron por otra de mayor tamaño y ocultaron la original en un arca.
En aquellos tiempos "la necesidad que mas les afligía era la esclavitud de los moros" y por ello "había de estos milagros muchos hallándose a la mañana los moros sin esclavos y los cristianos libres...y por trofeo de su libertad colgaban en su templo los grillos y cadenas.
Creció la devoción y determinaron de labrar junto a su ermita una torre y fortaleza para dormir defendidos y fundaron una Cofradía de Ballesteros.
Como los moros apenas cautivaban quisieron destruirla pero la Coronada no les dio lugar con cuyo amparo los labradores hacían maravillosas hazañas por eso los moros cuando acometían la ciudad "escarmentados y temerosos de lo mal que les iba por aquella parte huían de donde estaba esta santa Imagen".
Su ermita vino a ser "de las mas ricas fabricas del Andalucia".
En 1511 se fundó en su ermita bajo su advocación el Convento de Carmelitas "Como gastaron las cadenas y grillos de los cautivos rescatados en rejas".
Su devoción cayo en el olvido quedando oculta en un arca siendo sustituida por una replica de mayor tamaño, hasta que aparecida al incrédulo canónigo Lope tras predecirle su muerte a los ocho días, como así fue, se restituyó encontrándola en el arca enhiesta y que de su divino rostro salía un resplandor de rayos.
Tuvo gran devoción en la ciudad celebrando su fiesta en septiembre a 8 días de su nacimiento (el 8 de septiembre). Compitió en devoción con la virgen de la Capilla pudiendo haber sido patrona de la ciudad.
En 1621 se trasladaron imagen y convento a la Calle Martinez Molina.
Hoy día las calles linderas recuerdan su origen: Calle del Carmen y Barranco de la Coronada.
En 1742 se completó el retablo con la Coronación de la Virgen de Blas Moreno que hoy perdura en el Museo Provincial de Jaén.
Cien años antes de nuestra guerra civil sobrevivió al hacha, entonces fueron las "milicias urbanas" reclamando la constitución de 1812 durante los asaltos a los conventos en la revolución de 1835, un año antes de su desamortizacion.
En 1836 con la Desamortización de Mendizabal la imagen de la Virgen de la Coronada se trasladó a la Iglesia de San Bartolomé donde fue destruida durante la Guerra Civil en el asalto de los republicanos a la iglesia.
Después de la desamortización de Mendizabal, en 1857, el convento fue convertido en Prisión.
La portada era de arco de medio punto entre columnas, sobre el arco una hornacina con la imagen de la Virgen de la Coronada con un gran escudo a cada lado.
Una vez destruido el convento se vendió la Virgen de la Coronada de la hornacina y los escudos a un anticuario.
Su portada principal se trasladó a la Iglesia de Santa María de Linares. Está portada es del siglo XV. Su programa iconográfico es toda una relevancia y tiene que ver con la famosa sierpe de Jaén. En el catálogo de Romero de Torres (1913) ya aparece esta portada en Linares. Se trasladaría entre 1835-45 pues en el 35 se desamortiza y luego se destina a Prisión de la provincial.