Historia de Andújar

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Los primeros vestigios se remontan al Paleolítico en el entorno de Arroyo Escobar.
Encontramos dos grupos culturales netamente diferenciados: los agricultores de la vega del Guadalquivir y los pastores de las Sierras Meridionales.
Los pastores se asientan en una serie de campamentos estacionales que deben adaptarse al trasiego del ganado. Estos campamentos se sitúan en el interior y a la entrada de las cuevas y abrigos como las que encontramos en el Parque Natural Sierra de Andújar: Nava el Sach, El Rodriguero, Barranco del Bu y Selladores. Son abrigos pintados con unas figuras esquemáticas en torno a temas antropomorfos y zoomorfos acompañados de signos que tienen una componente netamente abstracta; los abrigos de la Jara y los del Canjorro de Peñarrubia poseen un estilo más naturalista.
De los agricultores de la vega, más rápidamente sedentarizados debido a la fertilidad de los suelos, encontramos yacimientos arqueológicos de estos poblados en La Ropera, Arroyo Escobar, Los Villares de Andújar.
De la Edad del Bronce hallamos en Andújar sepulturas excavadas en el granito de Sierra Morena de formas tanto antropomorfas como trapezoidales que se encuentran dispersas en La Centenera, en Los Escoriales, Cabezaparda y Peñallana.
Cerca de la desembocadura del Jándula en el Guadalquivir en un lugar denominado Valdezorras hay una necrópolis de cistas hechas de lajas de pizarra.
El máximo esplendor de las minas de plata de Sierra Morena se correspondió con la época romana pero su explotación fue ya importante durante el Bronce Final y en época Ibérica, siendo uno de los principales incentivos para el comercio fenicio y griego y posteriormente para romanos y cartagineses, debemos nombrar las de Navalasno, Los Escoriales y Mosquitilla.
El núcleo más importante fue el de los Villares de Andújar, la Isturgi romana, a partir de su paulatino abandono se desarrolló el actual núcleo de Andújar.
Antigua Itilurgi que fue asediada por los cartaginenses, Asdrúbal, Megón y Almílcar y posteriormente liberada por los Escipiones.
De la ÉPOCA ROMANA conserva algunos restos de murallas en el lugar llamado ANDUJAR EL VIEJO, a esta época también pertenece el PUENTE SOBRE EL GUADALQUIVIR de trece arcos.
En época romana existió en Andújar un pequeño núcleo relacionado con el puente que cruzaba el río Guadalquivir.
En Itilurgi se desarrollo un centro de producción de terra sigillata, que se exportó a larga distancia.
En Itilurgi se descubrieron unos interesantes alfares romanos activos desde mediados del siglo I hasta la mitad del siglo II, que fabricaban una fina cerámica llamada "terra sigillata", convirtiéndose en uno de los centros de producción cerámica más importantes de todo el Mediterráneo Occidental y del Norte de África.
La ciudad comienza a tomar importancia en la etapa de la ocupación musulmana, la conquista de Andújar por los árabes se produjo en el año 712 por Tarik, quien camino de Toledo toma la ciudad, integrándola en la Cora de Jaén.
Por su estructura y su misma toponimia Andújar tiene un origen árabe.
En el año 888 , el emir Abd Alläh Emir de Córdoba ordenó al general ´Ubaid allah ben Muhammad de la Cora de Jaén, el refuerzo de las murallas de varias poblaciones, entre ellas las de Anduyar.
Con la constitución del Hins de Anduyar, se convertía en uno de los principales centros defensivos de la región.
Este castillo, del que aún quedan algunos vestigios en la ciudad, tenía un perímetro aproximado de 1500 metros, contaba con cuarenta y ocho torreones, cuatro torres ochavadas, siete puertas que terminaron por ampliarse a doce, torre albarrana, antemuro, terraplén y fosos.
De la presencia árabe queda la traza urbanística del Barrio Antiguo.
La ciudad fue conquistada por Alfonso VII en 1147 aunque a su muerte la recuperaron los musulmanes.
En el invierno de 1170 un fuerte terremoto afectó a algunas zonas del país dejándose sentir con graves efectos en Andújar. Esta sufrió durante algunos días movimientos de tierra lo que dejó la muralla totalmente destruida, que los almohades reconstruyeron posteriormente.
La muralla de Andújar puede catalogarse estilísticamente dentro de la arquitectura defensiva almohade, muy similar a la muralla sevillana.
Es Fernando III quien en 1225 reconquista Andújar, que dos años más tarde en 1227 será organizada como Concejo, constituyéndose junto a Úbeda y Baeza en uno de los grandes Concejos de Jaén.
Se producirá un reparto de tierras donadas a nobles como los Pérez de Vargas, Escavias, Benavides... y a las Ordenes Militares como las de Calatrava y Santiago como recompensa a su participación en la reconquista de la ciudad.
En el año 1389, el rey Juan I de Castilla la cedió al rey León V de Armenia mientras viviera, sin derecho a sucesión.
Poseía el Fuero de Cuenca.
En la guerra civil organizada entre Enrique IV y su hermanastro Alfonso, Andújar va a permanecer fiel a Enrique y en agradecimiento a su fidelidad en 1466 añadirá el título de "Muy Noble y Muy Leal", al de "Ciudad" ya otorgado por su padre Juan II, concederá igualmente la condición de ciudad realenga sometida directamente al poder real.
Enrique IV otorga a la ciudad de Andújar el título de Muy Noble y Muy Leal, en fecha 23 de Noviembre de 1.466: Por facer bien e merced a la noble e leal cibdad de Andújar, por la grand lealtad e fidelidad que los vecinos e moradores della han tenido e tyenen a mis servicios y a los muchos e buenos e leales servicios que me han fecho e facen, tengo por bien y es mi merced y voluntad acrecentar su título e renombre e quiero que de aquí en adelante, para siempre jamás sea llamada, nombrada e intitulada e se llame, nombre e intitutle "la muy noble e muy leal ciudad de Andújar.
En la Baja Edad Media, Sierra Morena atrae ya a los rebaños trashumantes para que aprovechen los pastos de invierno. Son pastores de Cuenca y Guadalajara, los que llegan a esta zona para invernar y ello provocará conflictos, que tendrán que ser resueltas por el Concejo de la Mesta.
De esa misma época datan las Iglesias más antiguas de Andújar, Santa María, San Miguel, Santa Marina, Santiago y San Bartolomé comenzadas en estilo gótico y acabadas en otros estilos en siglos posteriores.
En el reinado de Carlos V, Andújar permaneció fiel al rey durante los levantamientos de las Comunidades de Castilla, por lo que les fueron concedidas las aldeas de San Vicente, San Julián y Villalva, manándolas repoblar.
En 1591 era una populosa ciudad con 13.000 habitantes y su fama con motivo de la devoción a la Virgen de la Cabeza trascendió hasta Hispanoamérica.
En los siglos XVI y XVII Andújar era ya una de las ciudades más importantes de la provincia de Jaén, con un notable crecimiento de la población. Dentro de su actividad económica de base agroganadera comienza a destacar la producción de cerámica artesanal que será exportada a otros lugares del país. Se une a esto la clara influencia del desarrollo del comercio atlántico que produce un ennoblecimiento de la ciudad debido a la existencia de una rica y poderosa aristocracia y una gran proliferación de órdenes religiosas que harán de Andújar lo que se ha llamado ciudad convento, asimismo se levantaron en la ciudad numerosas residencias nobiliarias.
Diversas epidemias y la expulsión de los moriscos, mermará su demografía a lo largo del siglo XVII, lo que también repercutirá en su economía.
En el siglo XVIII Andújar perdería término municipal al tener que ceder parte de él con motivo de la creación de las Nuevas Poblaciones de Sierra Morena.
Las protestas de la Corporación Municipal no fueron inútiles como evidencia la fundación de la aldea El Rumblar.
Miguel de Cervantes visitó el pueblo como recaudador de impuestos para la corona.
El 15 de julio de 1808 el general Castaños con la 3ª y 4ª división se enfrenta a tropas del General Dupont, obligándolas a refugiarse en Andújar.
Andújar tuvo una activa participación contra la invasión francesa, con acciones como el amotinamiento antifrancés de 1810 y el desmantelamiento de un destacamento del ejército de Dupont.
El 19 de Julio de 1808 tuvo lugar la Batalla de Bailén. Este histórico enfrentamiento supuso la primera derrota en campo abierto del ejército napoleónico. Las tropas españolas dirigidas por el Teodoro Reding vencieron en el campo de batalla a las tropas francesas que bajo el mando de Dupont Ilegaron desde Andújar, donde se encontraban. En esta decisiva victoria militar jugaron un papel decisivo no solo las condiciones climatológicas del lugar (el calor) o la escasez de agua, sino también el apoyo popular que el pueblo de Bailén dío a las tropas españolas, el excesivo agotamiento del ejercito frances que se desplazó a pie desde Andújar y la improvisación constante de Dupont.
Las tropas francesas se habían establecido el 3 de junio en Andújar colocando como gobernador de la ciudad a Nicolás Risueño (que termió huyendo de la ciudad tras la derrota de los franceses en Bailén). Durante la estancia de los franceses en Andújar el Convento de Santa Ana de los Franciscanos, el Convento de San Juan de Dios y la Casa del Marques de Vilanos se convirtieron en hospitales de Sangre y el Convento de Santa Clara, el Convento de Minimos de la Victoria, el Conventolas Trinitarias y el Convento de Jesús María en almacenes. La presencia francesa en Andújar acabo con la Batalla de Bailén.
En esta ciudad se firmaron las capitulaciones de la Batalla de Bailen. La firma de la capitulación de las tropas francesas el 22 de julio de 1808 tras la derrota de la batalla de Bailén, en el desaparecido palacio de los Condes de Gracia Real.
La elección como sede de las Juntas Revolucionarias Andaluzas entre el 2 de septiembre y el 19 de octubre de 1835. Tras la muerte de Fernando VII se forman en algunas regiones gobiernos autónomos o Juntas en oposición al centralismo. En Andalucía en 1835 todas las provincias están autogobernadas por Juntas y se decide que todas formen una Junta Suprema con sede en Andújar.
En 1900 tenía una población de 16.302 habitantes y tenía estación ferroviaria.
El desarrollo en Andújar del movimiento Juntero, en defensa de los derechos sucesorios de Isabel II, y con ella, de la causa liberal en España.
En Andújar se constituyó la Junta Suprema Central de Andalucía, que ha sido considerada como el primer símbolo de la conciencia política andaluza.
Esta relación se compone de caídos en acción de guerra y asesinados durante la Guerra Civil (Fuente http://heroesymartires.blogspot.com.es, Catedral de Jaén):
José Wenceslá García
Tomás Medina León
Antonio Pérez Zafra
Juan Manuel Solás López
José García Navarro (Sacerdote)
Manuel Cabezudo Astrais
Eduardo Dolkowski Dueñas
Manuel Medina de la Torre (Sacerdote)
José María de Lemus y Garzón (Sacerdote)
Francisco Funes Rueda
José Bellido Aragón (Sacerdote)
Francisco Xavier Bellido Aragón (Sacerdote)
Manuel Bellido Bellido
Eduardo Bellido Aragón
Carmen Lara Cosano
Adolfo Martínez Llinares
Pablo Islán García
José Garzón Garzón
Rafael Martínez Navarrete
José Abela Acosta
Jacobo Abela Fenoll
Mariano Bravo de Mansilla Ramírez
Ramón Pérez de Vargas Quero
Domingo Solana Rueda
José Fuentes González
Antonio Torres Estepa
Manuel Espejo Moscoso
Matías Martínez Llinares
Manuel Cano Sánchez
José Rodríguez Montané
Francisco Llinares Climent
Raimundo Medina de la Torre
Manuel Expósito Arenas
Carlos Barberán Juan
Francisco Garrido Lara
José Alzaga Nogales
Antonio Vallejo Garrote
Ildefonso Galán Cruz (Sacerdote)
Emilio González Romero
Rafael Muñoz-Cobo García
Juan R. Fernández Montes
Luis Cañete Mora
Alfonso Garrido López
José María Sánchez Sánchez
Francisco Flores Albarrán
Manuel Duque Martínez
Juan Martínez García
Leopoldo Pérez Verdejo
José Navarro Picó
José del Castillo Moreno
Salvador Lliévenes Ramiro
Juan Antonio Moreno Mesa
Ricardo López Verdejo
Juan Carmona Oyonarte
Francisco Bellido Bellido
José Hermosilla Martínez
Esteban Obejo Campos
Juan Orti Gómez
Pedro Solís Rodríguez (Sacerdote asesinado a los 50 años arrojado vivo a un pozo. Fuente: http://lugardemarmolejo.wixsite.com)
Juan de Dios Manjón Lombardo (Sacerdote)
Manuel Ramírez González (Sacerdote)
Antonio Romeu Collado (Sacerdote)
Prudencio de la Cruz (Sacerdote trinitario)
Segundo de Santa Teresa (Sacerdote trinitario)

Santuario Nuestra Señora de la Cabeza
Guardia Civil
Santiago Cortés González
Francisco Teva Barranco
Santiago Fuentes Guerra
Cipriano Crespo Crespo
Antonio Gómez López
José Rodrigo Martín
Eduardo Cecilio Martínez
Francisco Belmonte Fuentes
Justo Gila García
Francisco Fernández Tobarra
Juan González Almansa
José Torruz Palomo
Ignacio Izquierdo Jiménez
Eleuterio Sánchez Navío
Manuel Godoy Gusano
Manuel Castellano Moreno
Ramón García Arroyo
Francisco Moral Rodríguez
Francisco Nevado Carmona
Antonio Gordillo López
Miguel Chamorro Sánchez
Juan Gila Romero
Eduardo Balboa Espejo
Rafael Marques Muñoz
Miguel Montalbán Hernández
Juan González Pulido
Antonio Mudarra Riveiro
Diego Ortega Carrizo
Juan Aguilera Calera
Magdaleno Parras Fuentes
Serafín Aranda Sánchez
Juan Villanueva Hornos
Francisco Merino Anciano
José Garcés Ramos
Manuel Aguilera Morales
Jaime Falcó Tovar
Antonio Castillo Contreras
Baldomero Zafra Rosales
Pedro Santoja Pizarro
Juan García Gallego
Diego Mesa Varela
Eduardo Quesada Cruz
José Sevillano Arenas
Julián Manchón Rubio
Andrés Salazar Castillo
Manuel Cañas García
Antonio Aguado Morales
Joaquín Porras Castro
José Espinosa Mata
Juan García Alarcón
José León García
Julio Rodríguez Moreno
Manuel Cruz Olivanza
Antonio Martínez Romero
Diego Martínez Ortega
Juan Toro Galán
Germán Morales de la Serna
Laureano Vallejo Gadea
Diego Morente Godoy
Cayetano Fernández Navarro
Natalio Morgado Barreno
Sebastián Rodríguez Rodríguez
Manuel Pajares Ríos
José Vázquez Moto
Francisco Moral Parreño
Francisco Ruiz López
Antonio Avalo Justicia
Manuel García Rodríguez
Julio Sánchez Pérez
José Pipaón Martínez
Carlos Castillo Molina
Antonio Gila Romero
Pedro Pérez Ruiz
Vicente Algaba Ayuso
José García Roldán

Carabineros
Juan Porto Gallego
Juan Molina Gómez
Julio Maldonado Rodríguez
Seguridad y Asalto
Antonio Martínez García
Cosme Rojo Calahorro
Francisco Gutiérrez Ulines
Florencio Díaz Arévalo
Justo López Duarte
José García Moreno
Francisco Rodríguez Marfil
Francisco Rodríguez Maldonado
Tomás Gutiérrez García
Nicolás Salmerón Molina
Francisco Zamora Enrique

Paisanos
Juan Moreno Montalbán
Pedro Rueda García
Manuel Carrillo Jódar
Francisco Martín
Manuel Calzado García
Benito Cachinero Illesca
José Luis García García
Juan Torrerira Arenas
Antonio Ortega Carrizo
Sabino Canales Sánchez
Matías Penado García
José Pajares Rico
Dolores Jiménez Olivar
Carmen del Río Mendieta
Francisca Fuentes Torres
Rafaela Ruiz Caballero
Josefa de la Cruz Parniso
Ana María Valenzuela Vico
Feliciana Herrera Gil
Victoriana Palacio Iturralde
Aurina Gregorio Ortega
Clara Rivas Sabio
Lucía Cuñado Palacios
María Pérez Asensio
Manuel Duque Martínez
Manuel García Pelo
Eugenio del Pozo Felguera
Juan Martínez García
Eloísa Hervás Copado
Josefa Beltrán Hervás
Dolores López de Montilla
Concepción Gutiérrez Olmo
Dolores Peinado Gutiérrez
Isabel Gómez Cámara
Juana Chamorro Gómez
Ana Chamorro Gómez
Carmen Chamorro Gómez
Remedios Chamorro Gómez

Niños
Francisca Chamorro Gómez
Francisco Cabeza Villa
Francisco Ortiz Ruiz
Carlos Barranco García
Luis Canales Duque
José Romero Granadino
Rosario Marín Tobaruela
Juan Cabeza Villa
Constancia Jiménez Rodríguez
Angeles Villén España
Trinidad Maña Aparicio
José Pajares Sánchez
María Marín Tobaruela
Luisa Bueno González
Adolfina González Nieto