Se compone de varios tramos de una calzada escalonada de piedras que comunicaba el barrio del adarve (La Mota. Barrio del Adarve) y el Arrabal de San Bartolomé con el interior del recinto fortificado.
Tiene la anchura suficiente para que los carros circularan sobre ella.
Aparte de los vestigios de la calle han aparecido fragmentos de cerámica y de vidrio y de metal solamente un clavo.
La comunicación con el resto de la fortaleza de la Calle del Rastro se hacía por el entorno de la Torre de la Cárcel o de la Mazmorra (La Mota. Torre de la Cárcel), por la denominada Puerta Zayde (La Mota. Puerta Zayde).