Presenta una coloración aposemática, clara advertencia de los riesgos que pueden correr sus posibles depredadores.
Los elitros son de un tono anaranjado, sobre el que destacan dos manchas
negras en cada uno de los elitros (pequeña la primera, más grande la
segunda) y un triángulo invertido.
En el pronoto se aprecia una mancha negra de tamaño considerable, a modo de silla de montar.
La cabeza en negra y el pronoto rojo con dos grandes manchas negras simétricas, que se unen en el centro.
Con escasa capacidad de resistencia al frío.
Mientras que en estado larvario muestran habitos alimentarios carnívoros, el imago se alimenta fundamentalmente de malva sylvestris, aunque puede nutrirse de otras plantas cuando aquella escasea.
Suelen mostrar comportamientos gregarios, pudiendo localizarse un buen número de ejemplares agrupados en una misma planta.
Una curiosidad de esta especie (al igual que la mayoría de las especies de los Lygaeidae) es la toxicidad para los depredadores que intenten consumirlos, debido a la alimentación a base de plantas tóxicas.