Antiguas Carnicerías

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Ubicada frente a la Fuente de los Leones en la Plaza del Pópulo.
En el año 1545 la Carnicería de Baeza «por ser muy antigua se había caído».
En 1547 la ciudad se dirige al Emperador solicitando recursos para continuar el nuevo edificio que estaba haciendo «muy útil y provechoso... del cual estaba hecho muy grand parte».
Este edificio antiguamente se ubicaba en la Calle Atarazanas (pasada la Puerta de Jaén unos 30 m. a la izquierda).
Construcción que data del 1547.
Esta Carnicería concebida con indudable nobleza pese a su destino, netamente utilitario, que ha venido cumpliendo hasta la víspera de su traslado.
En 1962-63 fue desmontado y trasladado por la Dirección de Bellas Artes, a su actual emplazamiento en la Plaza del Pópulo, siendo necesario doblar dos de sus vanos, pasando a estar en sus laterales debido a la longitud primitiva del edificio, finalmente, entre el alero y los pilares se han colocado unas zapatas de madera que antes no existían.
Después de su traslado ha tenido diversos usos: secadero de pieles, archivo histórico y museo hasta el 1988, pasando posteriormente sede del Patronato de Juventud y Deportes del Ayuntamiento de Baeza.
Destaca el monumental escudo de Carlos V.
Consta de dos cuerpos.
El primer cuerpo se abre su sencilla puerta adintelada y tres ventanas con salientes rejas, a la derecha, el escudo del Corregidor y a la izquierda el de la ciudad. Encima una imposta de más de 40 rosetas entre dos molduras, todas diferentes entre sí, que no corresponde exactamente a la división de pisos, pues queda más baja; sobre la imposta, una sucesión de mirillas de ventilación del piso bajo con relieves de balaustrillos.
El segundo cuerpo forma un mirador con pilares cuadrados, interrumpido en el centro por un monumental escudo imperial; tal vez un secadero de pieles. En la parte posterior del mirador, que en el anterior emplazamiento daba al nivel de una calle, la de las Atarazanas, existían seis tajones donde se vendía la carne al público.
Las reses se sacrificaban en la planta baja, cuya techumbre está sostenida en el centro por seis columnas (antes ocho) con los típicos capiteles de bolas que tanto abundan en la comarca.